Because We Have To

 

¿Cómo decirte que no?

Si es tan satisfactorio verte tan feliz.

Por ti me he reinventado tantas veces, he aceptado y entendido cosas tan nuevas que ahora me parecen estándares de vida.

Eres tan maravillosa

Así que ¿Cómo no imitar a alguien que admiras?

Y sin embargo, al mismo tiempo hay algo que crece por encima de mi, y me aplasta mientras recorro nuestro camino.

¿Será que no soy tan especial como tu? mirándome al espejo, más allá de las diferencias físicas que veo entre tu y yo me pongo a conversar con el extraño en el reflejo.

Me doy cuenta lo mucho que me he ignorado, pero se que sigo ahí, muy en el fondo, intentado decirme algo.

¿Seré solo un farsante? 

De pronto estoy solo en casa otra vez, recordando en destellos lo mucho que me encantaba estar así, con las luces apagadas, música de fondo, algún documental en la televisión, o tal vez ponerme creativo con la cámara.

Y sin embargo ahora solo puedo pensar en ti, ¿La estarás pasando bien?

¿Se aprovechará de tu entusiasmo por él?

y ¿Qué hay de mi?, ¿te causo esa misma emoción siendo tal cual soy? 

O a caso todo este tiempo lo que nos ha unido es que soy una puerta abierta a todo, sin ningún criterio propio.

Un recipiente vacío que puede llenarse con cualquier cosa que quieras.

Y, ¿Por qué se ve tan mal de pronto tu situación?

¿Será por los enormes riesgos que sabemos que existen?

¿Será que estoy celoso de no ser yo quien te emociona y la saca de la rutina aburrida?

La rutina, el llegar del trabajo, el ver series, el hacer las cosas en el mismo orden, siempre de la misma manera parecen solo existir en casa, conmigo.

Yo soy un llano árido, predecible y sin gracia, ¿Qué oportunidades tengo ante él/ellos? no traigo emoción a tu vida ni la adrenalina propia de una relación cargada de infidelidad y tabú.

Lo más difícil siempre es permanecer dentro del margen.... y curiosamente es lo más aburrido.

Si, hay algo de recelo en eso... pero tampoco quiero ser alguien más, estoy harto de imitar y de sentirme tan reducido a una tediosa rutina.

Estoy harto de esperar mientras te entregas a la incertidumbre, mientras me invade una sensación de soledad creciente.

Al fin estás en casa, sin embargo la noche terminó, la aventura sucedió y no siento lugar para mi.

Desconozco tu olor, tu manera de caminar, tu forma de hablar.

Entre oraciones erráticas me comentas que llegaste y que no paso nada, después balbuceas fragmentos de tu noche un tanto contradictorias.

Me siento fuera de lugar... así que tomo mi lugar aparte, está claro que tu aventura no me corresponde. La noche se acabó.

Estoy harto de tenerte tanto apego y de ser tan dependiente emocionalmente de ti.

Te amo, pero quiero hacerlo a mi manera y siguiendo mi propio camino.